¡La final del Mundial de Clubes tuvo de todo! Chelsea se coronó campeón ante el poderoso PSG, pero el verdadero show se lo robó Luis Enrique, quien agredió al delantero João Pedro en plena trifulca postpartido.
Sí, como lo lees. El técnico español, frustrado por la derrota, protagonizó un tenso momento al darle un manotazo al jugador brasileño justo cuando discutía con Donnarumma y Hakimi. Todo quedó registrado por las cámaras… y por los árbitros.
Aunque Luis Enrique intentó justificarse diciendo que solo quería separar a los futbolistas, las imágenes cuentan otra historia. El gesto no pasó desapercibido para la FIFA, que ya prepara una sanción. Por ahora se habla de una multa económica, pero si el árbitro lo reportó como conducta violenta, podría enfrentar una suspensión en Ligue 1 o Champions League.
Mientras tanto, el técnico bajó el tono en la rueda de prensa y admitió que “los blues jugaron mejor” y “merecieron el título”. Pero en redes, las críticas no paran: hay quienes lo acusan de perder el control y otros que lo defienden por “querer calmar la situación”.
¿Será que le costará el puesto? ¿O el PSG le dará otra oportunidad? Por ahora, lo cierto es que Luis Enrique no solo perdió la copa, también perdió la compostura. Y eso, en el fútbol moderno, puede salir muy caro.